Redescubriendo Mendoza

Redescubriendo Mendoza

Argentina es productor de vinos de primera importancia a nivel global. Cuentan con más de 900 bodegas por lo que cada viaje para visitar las zonas vitivinícolas representa siempre una novedad, un descubrimiento. Esta vez estuve invitado por CFI (Consejo Federal de Inversiones) y Coviar  para hacer un recorrido primero por distintas subregiones mendocinas (en alianza con ProMendoza) y después para descubrir los viñedos de la provincia de San Juan.

Mendoza y San Juan son parte de la región del Cuyo (en la que también está La Rioja argentina) que reúne el 94.6 % de la producción del país rioplatense. La superficie cultivada total es 184,000 ha.

Si nos centramos en Mendoza debemos resaltar que cuenta con 146,815 ha. Se divide: Primera Zona (Luján de Cuyo y Maipú), Oasis Este, Oasis Norte, Valle de Uco y Oasis Sur (San Rafael y General Alvear).

LUJÁN DE CUYO

La zona más cercana a la ciudad y la más clásica. Llena de grandes nombres que han hecho historia en las últimas décadas, cuando el vino argentino despertó de su letargo y se atrevió a mirar al mundo. Pero la idea era conocer proyectos nuevos de pequeñas empresas que van encontrando su camino.

Familia Cánepa Martín

Ubicada en Chacras de Coria este emprendimiento familiar empezó en el 2002 cuando decidieron retomar la actividad vinícola de sus antepasados. Nos recibió Juan Pablo Cánepa quien nos presentó su bodega, la que han hecho crecer con el esfuerzo cotidiano, superando obstáculos y retos.  Ya han empezado a recibir reconocimientos y éxitos comerciales. Una enología de corte tradicional pero atenta a las nuevas tendencias.

La Jirafa y el Enano: nos sorprenden empezando con su Pét-nat con una mezcla de criolla (80 %) y vino malbec rosado (20%). El dulzor está controlado y se complementa bien con las burbujas y espuma. Este tipo de vinos está en pleno auge y los mercados internacionales están ávidos de propuestas de calidad.

La Padovana Antojo 2016:  blend de malbec, merlot y  tempranillo. Entrada cálida en la boca con un final redondo.

 

Krontiras

Un armador griego y su esposa mendocina concretaron el sueño de crear una bodega distinta en Mendoza. El proyecto tiene una impronta definida y los objetivos claros. Apuestan por producir vinos con la mínima intervención con una agricultura orgánica buscando hacer vinos de filosofía natural y en muchos casos biodinámicos. El carácter está marcado también en el diseño tanto de la bodega como de sus etiquetas.

 

Cosmic Amber 2022: su vino naranja es una mezcla de chardonnay, sauvignon blanc y torrontés y solo se le agregan un poco de sulfitos antes del embotellado. Nariz fina con toques aromáticos. Boca sedosa con acidez cítrica.

Malbec Natural 2022: es su vino bandera del que producen 34,000 botellas. Fruta negra, fresca acidez, textura firme y buen agarre final.

Aglianico Natural 2022: son los precursores de esta variedad en Mendoza. Fruta silvestre, frescura a raudales y tanino domado.

Krontiras Explore Malbec 2020: este vino destaca por su fruta negra dulce.

Wisdom 2019: el distinto dentro de los catados. Su paso por barricas le aporta un toque ahumado sin perder su carácter primario. Es persistente.

Amansado

Una visita que comenzó por todo lo alto. Literalmente. Nos llevaron a unos viñedos insólitos en unos lomajes en los que han plantado viñedos en terrazas. Un microterroir con gran potencial. La familia Brennan, vinculada al negocio farmacéutico, apuesta por sus dos grandes aficiones: el caballo criollo y los vinos. Y de allí la marca que los define. Para seguir con las sorpresas nos llevaron a otro lugar único. Un oasis lleno de palmeras y una arquitectura sugerente donde desarrollan un proyecto de enoturismo y en el que finamente catamos algunos de sus vinos

Empezamos la degustación con: Amansado Pedro Ximénez, un blanco sutil y agradable y Amansado Rosado que es en realidad un blanco (Pedro Ximénez 95%) tintado por un 5% de cabernet Sauvignon que no solo aporta color sino un nota especiada

Amansado Cabernet de Sed 2022: hecho con la técnica de maceración carbónica, es pura fruta, un jugo de cabernet sauvignon. Para servir fresco, compartir y celebrar.

Amansado Cabernet Sauvignon y Amansado Malbec: muestran buen carácter varietal y son fáciles de tomar

Yunta: aquí se mezclan malbecs de Gualtallary y Perdriel.

Gran Amansado Blend: una selección de malbec y cabernet Sauvignon en partes iguales, con un paso de 18 meses en barricas.

Al final nos ofrecieron una sorpresa:  su Pedro Ximénez criado bajo velo por dos años en un contenedor de cerámica, que me hizo recordar a un Fino de Montilla-Moriles (Andalucía).

ESTE DE MENDOZA

El Este de Mendoza es como un gigante invisible. Es el área con mayor producción de la provincia, pero muchos de sus vinos alimentan las cubas de bodegas grandes o se convierten en anónimos graneles. A la vez acoge a una gran cantidad de pequeños productores (la mayoría con menos de 5 Ha), proyectos familiares, algunos de los cuales están tomando las riendas de sus viñedos para sacar etiquetas propias sin miedo al éxito.

Pecne Te

(Pecne Te, «madre tierra» en el lenguaje huarpe). Proyecto de capitales suizos y locales. Todo funciona como un reloj. El asesor enológico es helvético y propone una enología clásica, con vinos jóvenes y otros con largas estancia en barricas. Hacen suya la bonarda, variedad tradicional de la zona con la que logran expresa todo su carácter frutal.

Torrontés : aromas moderados, boca suave.

Syrah 2019: fruta negra sobremadura y en la boca suave astringencia.

Bonarda 2019: muy limpio, suave, con fruta rica y nítida.

Aleph

Una bodega que evidencia una revolución en ciernes.  Entre cubas y piletas enormes el enólogo Matías Morcos ha empezado su proyecto personal (La Revolución del Este) y le ha abierto las puertas a otros productores que quieren ir desarrollando sus propios vinos.

Matías nos ofreció en primer lugar el Naranjo Moscato Amarillo MaterNatura: un moscato giallo con fina nariz floral, Matías Morcos La Criolla: proveniente de antiguos parrales, mostrando juventud y vivacidad y Matias Morcos Tinto del Este: un «blend» protagonizado por la bonarda 80% y complementado por varias otras cepas típicas. Un homenaje a la tradición local.

The Wine Plan

También pudimos catar 2 vinos de esta bodega. La Belle Marguerite rosado: hecho con la uva marselan  y Eureka Malbec 2021: fino y sedoso.

VALLE DE UCO

Si la variedad malbec fue el gran regalo que Dios le dio Mendoza (y a toda la Argentina) y le permitió darse a conocer, el Valle de Uco se ha convertido en el centro de gravedad de la provincia con vinos que sorprenden al mundo.  Allí se intensificó la exploración de lugares y alturas, de suelos y variedades que han llevado al vino argentino a un nivel insospechado.

Finca Suárez

De una familia vinculada a la política y la diplomacia, pero, sobre todo, con un antiguo arraigo en la zona. Fuimos atendidos como en casa y probamos las mejores morcillas del viaje. Se encuentran en un lugar privilegiado, Paraje Altamira, y producen blancos y tintos de alta calidad.

Empezamos con un delicado Rosado de Pinot Noir

Semillon 2021: mostró lo mejor de esta cepa y este lugar. Gran frescura y acidez. Flores y miel en nariz, boca con buen volumen y acidez punzante.  Después catamos el Chardonnay 2021 en el que nuevamente se siente esa tensión y frescura que da el terroir.

También pudimos hacer un interesante experimento probando 3 malbecs de distintos sectores que estaban en tanques para entender el trabajo fino que hacen en detectar lo que cada viñedo puede ofrecer.

Alfa Crux(Grupo Agostino)

Una bodega que nadie debe dejar de visitar en Mendoza por su arquitectura deslumbrante. Un proyecto que visité hace una década pero que sigue sorprendiendo por su vanguardismo. Sus vinos siempre apostaron al largo añejamiento y gran estructura.

Gewurztraminer Crux Extra: una novedad de esta uva no tan difundida en Mendoza. Los típicos aromas florales y especiados se presentan en equilibro. En la boca es sutil y agradable.

Crux Semillon: en este caso la semillon tiene un tiempo de crianza en barricas que normalmente esta uva capitaliza bien para aportarle cierta complejidad, como en este caso.

Después probamos Crux Extra Malbec 2019 y Crux Extra Cabernet Franc 2019, dos buenos ejemplos de estas variedades y del estilo de la casa.

Alfa Crux 2016 (no filtrado): es intenso y en el final se siente cierta astringencia característica.

Alfa Crux Corte 2014: la estrella de la cata con una mezcla de tempranillo (cepa muy representativa de este proyecto), malbec y cabernet sauvignon. Con 8 años de vida ya ha desarrollado todo su potencial, la madera se ha domado y la potencia se expresa con una mayor profundidad y equilibrio.

Super Uco

Saliendo de la bodega anterior empezó a llover y al rato hubo una caída de granizo por unos minutos.  Nos acompañó un precioso arco iris hasta que llegamos a The Vines, un proyecto fantástico que aloja algunas bodegas muy especiales, entre ellas Super Uco. Los hermanos Michelini son ya una leyenda en Mendoza. Cada uno de ellos tiene proyectos propios pero es aquí donde el clan se une para producir vinos en conjunto y desarrollar toda su libertad y creatividad. Nos recibió Gerardo y nos mostró la bodega y viñedo, pero también estuvieron Matías y Juan Pablo. El cielo seguía dando un gran espectáculo y el cierre de la tarde no pudo ser mejor.

Aquí probé algunos de los mejores vinos del viaje.

Calcáreo Río Malbec 2018: un primer impacto floral pero también hay fruta roja ácida. En la boca la textura habla del suelo y acompaña una fruta envolvente, gestando una nueva forma de elegancia.

Super Uco Syrah Gualtallary 2019 “Fratello”:  solo 1500 botellas. El Syrah es un pretexto para mostrar nuevamente un lugar y un estilo.  Estructura y firmeza con un tanino vivo y fresco.

Genitori Mio: esta línea es un homenaje a sus padres, a sus ancestros, y este Genitori está hecho a base de cabernet sauvignon de Altamira con el resto de Malbec y es criado en cubas de roble por 20 meses. Logran un gran vino con una evolución noble. Aromas ahumados, tabaco, notas herbales del cabernet. Boca compacta, sensual, refinada.

SAN RAFAEL

Este viaje me permitió conocer el sur de Mendoza y empezar a entender su historia y potencial. Hay mucho pasado pero siento que hay un nuevo despegue que les permitirá una mayor presencia. Entre otras medidas está el relanzamiento de la DOC San Rafael que deben capitalizar y manejar con inteligencia para consolidar una plataforma e imagen que les permita afrontar los siguientes retos enológicos y comerciales.

La Abeja

La bodega más antigua de San Rafael, con una historia novelesca de amores, desamores, frustraciones e ilusiones. Sus instalaciones son testimonio de esta larga cronología que empezó a gestar su fundador Rodolfo Iselín en 1888. El antiguo mirador es un vestigio de otros tiempos que invita a imaginar el estilo de vida de esa época.

Finca La Abeja Malbec Gran Reserva: mezcla cosechas (zona Las Paredes): nariz con lácticos y tostados, boca suave,

Finca La Abeja Tempranillo Gran Reserva 2020: ahumados, fruta, la tempranillo buena astringencia sin perder finura.

L’Abeille 2019,20-21  Blend de malbecs: 3500 botellas. Boca más amplia, fruta, con madera presente, que se redondeará con el tiempo

Iselin 1888 Malbec, merlot, tempranillo y cabernet sauvignon de las cosechas 2016-17-18-19.  Es agradable

Espumoso 2020: hecho con una curiosa versión del método tradicional. Chenin blanc y chardonnay. nariz con manzana madura.

Alfredo Roca

Bodega de larga trayectoria que fue adquirida por don Alfredo Roca en 1976 y que hoy sigue sus manos y las de su familia. Hay un espíritu clásico en el que privilegian tintos con buen potencial de guarda. Pero también hay diversidad que se refleja en sus distintas líneas y el abanico de cepas blancas y tintas

Chardonnay / Pinot Noir Reserva de Familia  Reserva de Familia 2019: medio cuerpo, madera, carácter chardonnay de mediana expresión

Cabernet Franc Reserva de Familia 2018.  Con una leve nota herbal, pero predomina la fruta roja amable.

100 años 2012, mezcla  de cabernet sauvignon 50% Malbec 35%, Syrah 15%. Un vino con una década que mantiene un carácter primario y juvenil en la fruta y que se sostiene en una buena estructura.

Syrah-Cabernet Sauvignon 1999: un lujo haber probado este vino del siglo pasado. Se presente muy vivo con una sana evolución.

Araujo

Estuvimos directamente en los viñedos de Villa Atuel donde el enólogo nos trasmitió toda la pasión por la tierra y el vino. Es otra historia de persistencia de una familia dedicada a la agricultura y que ofrece vinos francos.

Nucha  de su línea orgánica donde ofrecen vinos jóvenes y extrovertidos. Durante el almuerzo probamos el Casa Araujo Malbec 2019 y Graciano en honor al patriarca de la familia.

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